Las firmas que facturen determinada suma deberán informarlo todos los meses. ¿Qué margen tendrán el sector del comercio y la industria?
Por iProfesional
08/02/2023 – 16,54hs
Al programa Precios Justos, anunciado por el ministro de Economía, se le suma el fuerte control que la secretaría de Comercio lleva adelante en las ventas, stock, precios y costos de determinadas empresas. En este sentido, el Gobierno publicó en el Boletín Oficial la resolución 67/2023, con una medida que pobliga a las empresas de comercio e industria que hayan registrado en 2019 ventas totales (en el mercado interno) superiores a determinada cifra, a informarlo mensualmente.
Las firmas deberán facilitar sus datos al Sistema Informativo para la Implementación de Políticas de Reactivación Económica (Sipre), que maneja Matías Tombolini.
¿A partir de qué cifra deberán informar las empresas?
Las microempresas deberán compartir su información a partir de ventas superiores a $ 23.560.000 en el caso del comercio, y de $ 21.990.000 en el de la industria; y las pequeñas lo harán cuando superen $ 141.680.000 y $ 157.740.000 respectivamente.
Para las medianas empresas del tramo 1 esos límites serán de $ 1.190 millones para el comercio y de $ 986 millones para la industria; y para las del tramo 1, de $ 1.700 millones y $ 1.441 millones.
La normativa precisó que “por ventas totales en el mercado interno, se entiende al valor de las ventas realizadas con destino en el territorio nacional, excluidos el Impuesto al Valor Agregado (IVA) y el Impuesto Interno que pudiera corresponder”.
Las empresas deberán informar además los precios y las cantidades producidas y vendidas, como también el stock de todos sus productos durante enero de 2023, teniendo plazo hasta el día 10 de marzo.
Massa y Tombolini vienen implementando un fuerte control de precios en varios sectores, para contener la inflación.
La carne no para de subir y el Gobierno anunciaría medidas
A lo largo del año pasado los diferentes cortes de carne vacuna que conforman la canasta del IPC que elabora el INDEC mostraron subas muy por debajo del índice general, lo cual, debido al peso que tienen en la conformación del índice jugaron a favor del mismo, ya que de alguna manera ayudaron a que este no rompiera la barrera psicológica de los tres dígitos.
De hecho, los cortes más demandados mostraron incrementos que en promedio rondaron el 40%, es decir mucho menos de la mitad que registró el índice general, ya que por ejemplo, la el kg. de paleta subió un 45%, la nalga un punto porcentual menos, al igual que el cuadril, en tanto que el asado apenas superó el 40%.
Esta situación llevó a que su precio se ubicara apenas por encima de otros productos de la canasta básica, lo cual ponía en claro una enorme distorsión de los precios relativos
“Sin dudas que el parate en los precios de la carne en la última parte del año fue clave para que el índice de precios mostrara cierta desaceleración”, explican fuentes del sector.
La preocupación en las esferas oficiales tiene un sólido fundamento: si ese incremento se trasladara en su totalidad a las carnicerías, estaría aportando solo en febrero una suba del orden del 2%, que podría incluso ser mayor si se toma en cuenta el efecto que podría tener sobre otros productos como el cerdo o el pollo.
Fuente: iprofesional.com